miércoles, 27 de marzo de 2013

Fallo de Teletransportación

Mientras miles de personas estaban pegadas a los televisores viendo como se jugaba España la primera plaza del grupo, yo y otras tres personas más preferimos echarnos una sesión lúdica.
Yo llegué tarde a la sesión porque tenía cita con el dentista, así que cuando llegué estaban acabando una partida de Génesis. Cuando acabaron, saqué mi copia del Hansa Teutonica por requerimiento popular.


Tras una explicación medio decente ( ya que llevaba sin jugarlo desde finales de septiembre y las reglas no la tenía muy frescas) nos pusimos manos a la obra. Al ser novatos mis tres contrincantes, fueron un poco a ciegas los primeros turnos (por instinto), pero fueron viendo los roces y puteillos que ofrecen el juego y que requieren de unas pocas partidas para sacarle su jugo al juego.
Creo que ellos al igual que yo vieron que el juego no tiene una estrategia clara, es más de adaptarte a lo que hacen los demás e ir adaptando tu estrategia.
Al principio me posicione en la ciudad que otorga un punto de acción más, pero rápidamente Carlos ocupo la casilla de la ciudad más a la derecha y me quitó esa ventaja, por su parte, Adrián se instaló en una ruta con las dos ciudades controladas a esa ruta, lo que de daba 2 puntos cada vez que reclamaba ruta.Antonio, por su parte iba de oeste a este reclamando las ciudades (lástima que no le dio tiempo a unir las dos ciudades rojas). Así que Carlos y Adrián se escaparon del pelotón en términos ciclísticos.
Cuando se acercaba el final de la partida, hay tres maneras de que acabe el juego, Carlos tenía a tiro dos de ellas, llegar a 20 puntos durante la partida o coger la última ficha  de comida, e hizo esta última para a la postre ganar la partida.

Carlos va en cabeza y se acerca el final de la partida
 He de decir que para mi este juego está infravalorado, debería de estar más arriba en el ranking de la
bgg pero a lo mejor el que sea abstracto no le favorece. A mi  me encanta.

final de la partida



1º Carlos 50
2º Ángel 33
3ºAdrián 24
3º Antonio 24










Después del Hansa Teutonica, nos dispusimos a cenar y acto seguido sacar Kemet, un juego de 2 a 5 jugadores de darse tortas con un toque de civilizaciones que premia al jugador que va a la guerra., pero con cabeza.

set inicial del jugador

Una cosa que llama la atención del juego es su aspecto gráfico, tiene un tablero bonito de calidad al igual que las fichas y losetas, a lo mejor la solución de como utilizar el mapa según el número de jugadores no es muy elegante, pero para eso ya los gustos de cada uno, en resumen, los materiales del  juego son de buena calidad.

juego desplegado

Las instrucciones no son muy extensas pero a la hora de explicar el juego se hace un poco largo debido a que hay que explicar las losetas de poderes (rojas,guerra; azul, defensa; blanca, intermedia entre azul y roja), las cartas de combate, de apoyo y acciones. Pero una vez asimilado es muy intuitivo ya que no llevan textos, sino iconos ( lo que hace que sea independiente del idioma).
La partida duró unos 90 minutos en los cuales no fui consciente de ese tiempo ya que los jugadores de base tienen cinco acciones a poder realizar de base y realizan una y el siguiente otra y así hasta que todos hayan hecho sus cinco acciones ( Antonio en la partida hubo ocasiones en la que levaba acciones de menos o de más).
Las mecánicas del juego me recuerdan a otros juegos, salvando las distancias claro está, pero las encuentro muy bien implementadas.
En cuanto a la partida, he de que Carlos y Antonio se vieron las caras pronto y tuvieron un "rifi rafe" toda la partida, lo que nos dejó a mi Adrián a mi un poco a nuestra bola, que nos buscamos lo justo para poder puntuar.

Carlos y Antonio enfrascados en batalla

El juego de base lo gana quien llegue a 10 puntos de victoria, pero en la 1ª partida recomiendan a 8 puntos que fue lo que hicimos.
Pues cuando yo llevaba unos 7 puntos y Adrián tres cuarto de lo mismo empezaron los "panfletos" (propaganda que se  lanza para que se ataque a alguien en favor de uno) por ambas partes aunque a priori yo tenía cierta ventaja, que equivocado estaba.
Esta última parte fue la que más risas y emoción se produjo, Adri intento invadir mi ciudad que deje desguarnecida. Para ello necesitaba gastar una carta que teletransportara sus tropas, pero no contaba que yo tuviese otra que anulara la suya, primer chasco.
teletransportación anulada

Así que se quedó a las puertas de mi ciudad, pero con una acción más de moverse y poder atacarme. Así que tuve que decidir atacarla con tropas que tenía en un templo cercano para eliminar su amenaza, cosa que logré hacer.

defendiendo mi territorio

Cuando la cosa pintaba toda para mi, Carlos en un acto de empatía con Adri, decidió atacarme con otra carta de teletransportar, pero no contaban con Antonio, que al igual que yo, utilizó una carta que anulaba a esta otra, provocando las risas pertienntes y anulando lo que hubiera sido el último combate épico de la partida.
Al final ganó Adri por poseer tres templos al final del turno que le dio punto extra, para romper el empate conmigo.

disposición final de la partida


1º Adrián 9
2º Ángel 7
3º Carlos 6
4º Antonio 1











 El juego me gustó bastante y me gustaría volverlo a jugar, pero lo que más gusto de la sesión, fue la compañía, ya que los juegos de mesa son una actividad social ( aparte de una actividad intelectual) donde hace falta personas para poder disfrutarlos.

2 comentarios:

  1. Jajaja, me meo con la mención a lo de los panfletos, y al recordar la carta de Antonio anulando la de Carlos! jajaja, bueniiiisimo.

    Q final de Kemet! con accidentes-tropezones mil y puteo por doquier! qué risas!
    Eso si, hubiese estao tb bonito ese último combate épico entre tú y yo ;)

    Un saludo crack ;)
    P.D; En cuanto pase más días por aquí (y no en el pueblo) a ver si repetimos vicio verdad?

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